viernes, 19 de octubre de 2012

Transición a la Democracia



La Transición a la democracia es el nombre por el que se conoce al período de la historia de Chile en el cual tiene lugar el restablecimiento pleno del funcionamiento de las instituciones democráticas a través del traspaso del poder político desde lasFuerzas Armadas y de Orden, encabezadas por el Comandante en jefe del Ejército, general Augusto Pinochet, hacia el Presidente democrátic amente elegido, Patricio Aylwin, finalizando de este modo el Régimen Militar

En diciembre de 1989 se efectúa la elección que comenzaría el régimen democrático. El demócrata cristiano Patricio Aylwin, como el candidato de la Concertación de Partidos por la Democracia (DCPSPPDPRSD), se enfrenta con Hernán Büchi, candidato de la coalición Democracia y Progreso (UDI-RN), siendo electo presidente el demócrata cristiano, seguido de Büchi y, en tercer lugar, el candidato populista de centroderecha Francisco Javier Errázuriz Talavera, abanderado de un movimiento instrumental llamado Unión de Centro Centro. En febrero de 1991, la Comisión Verdad y Reconciliación, establecida un año antes por Aylwin, lanzó su informe de Violaciones a los Derechos Humanos durante el período del gobierno militar, conocido como el Informe Rettig (debido al el ex-senador Raúl Rettig, presidente de la comisión).




Presidentes a lo largo de la Democracia en Chile

1990-1994 Patricio Aylwin Azócar.
1994-2000 Eduardo Frei Ruiz-Tagle.
2000-2006 Ricardo Lagos. 
2006-2010 Michelle Bachelet

2010-..... Sebastían Piñera 






El Plebiscito nacional de 1988 fue un referéndum realizado en Chile el miércoles 5 de octubre de 1988, durante el Régimen Militar. Este plebiscito se llevó a cabo en aplicación de las disposiciones transitorias (27 a 29) de la Constitución Política de 1980, para decidir si Augusto Pinochet seguiría en el poder hasta el 11 de marzo de 1997.
Del total de votos válidos, el resultado fue de 44,01% por el «Sí» y de 55,99% por el «No» —del total de votos escrutados, el«Sí» obtuvo el 43,01% y el «No», el 54,71%—. El universo electoral habilitado para votar ascendió a 7 435 913 personas.
Conforme a las disposiciones transitorias de la Constitución, el triunfo del «No» significó la convocatoria de elecciones democráticas conjuntas de presidente y parlamentarios al año siguiente, que conducirían al fin de la dictadura y el comienzo del periodo conocido como transición a la democracia.

Constitución Política de 1980


File:C°.jpgLuego del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973, no sólo fue suspendida la Constitución de 1925 sino que, además, se buscó crear una nueva institucionalidad completamente desde cero. Se designó una "Comisión de Estudios de la Nueva Constitución" (CENC), más conocida como Comisión Ortúzar, a que se le dio a la tarea de crear un anteproyecto de constitución. El Consejo de Estado discutió e introdujo algunas modificaciones al anteproyecto entre 1978 y 1980. Tuvieron aquí alguna participación el expresidente Jorge Alessandri, Presidente del Consejo, y Enrique Ortúzar. Con posterioridad a la redacción afinada por dicho cuerpo consultivo, la Junta Militar también le introdujo algunos cambios. El texto fue, en definitiva, sometido a consideración de la ciudadanía mediante el plebiscito nacional de 1980, en el que fue aprobado. Dicho plebiscito ha sido y sigue siendo cuestionado, atendidas las irregularidades formales de su celebración (entre otras cosas, por ejemplo, no existían registros electorales y la oposición se vio impedida de efectuar campaña, al estar restringidas algunas libertades públicas, como la de expresión y reunión). La Constitución entró en vigencia el 11 de marzo de 1981, aunque hubo sectores de la ciudadanía que no reconocieron su validez.

Régimen militar


El Régimen Militar es el nombre con el que se conoce al período de la historia de Chile comprendido desde el 11 de septiembre de 1973 y el 11 de marzo de 1990, durante el cual dicho país estuvo bajo una dictadura militar encabezada por el General Augusto Pinochet y los otros comandantes de las Fuerzas Armadas, que establecieron una junta de gobierno tras el golpe de Estado que derrocó al gobierno constitucional del presidente Salvador Allende. Pinochet, comandante en jefe del Ejército asumió el liderazgo de la junta militar de gobierno compuesta inicialmente por José Toribio Merino,Gustavo Leigh, y César Mendoza en representación de la Armada, Fuerza Aérea y Carabineros, respectivamente.
File:Junta Militar de Pinochet.JPGTras el golpe, fueron cometidas sistemáticas violaciones a los derechos humanos, registrándose al menos 28.259 víctimas de prisión política y tortura, 2.298 ejecutados y 1.209 detenidos desaparecidos. Se limitó la libertad de expresión, se suprimieron los partidos políticos y el Congreso Nacional fue disuelto. Políticamente, el régimen se caracterizó por un modelo autoritario de gobierno. Aunque originalmente tuvo un neto carácter militar, con el paso de los años fueron incorporándose colaboradores civiles al gobierno.
Durante este período, Chile experimentó una importante transformación económica, política y social. En lo estrictamente económico significó un cambio radical de orientación del papel del Estado de un rol productor e interventor, a uno de tipo subsidiario, inspirado en las doctrinas económicas neoliberales. En lo social significó el dominio sin contrapeso de los sectores empresariales, el aumento sostenido de la desigualdad de ingreso, junto con un incremento en la precariedad e inestabilidad laboral de los sectores asalariados. En lo cultural, dio lugar al denominado "apagón cultural", caracterizado por la represión y autorrepresión de ciertas manifestaciones culturales consideradas contrarias a la línea oficial.
En 1980, tras un irregular plebiscito, fue aprobada una nueva constitución en la que Pinochet reafirmaba su cargo como presidente mientras la junta de gobierno se limitaba al poder legislativo. El texto constitucional estableció también una serie de disposiciones que, eventualmente, permitirían el retorno a la democracia como consecuencia del resultado del plebiscito del 5 de octubre de 1988. En dicho plebiscito, el pueblo chileno le denegó a Pinochet un nuevo mandato y, en consecuencia, se celebraron elecciones presidenciales democráticas. La dictadura militar llegó a su fin el 11 de marzo de1990, cuando Augusto Pinochet entregó el poder a Patricio Aylwin. Ese día terminó el Régimen Militar y se dio inicio al período de la historia de Chile conocido como la transición a la democracia.

Allende




 
La elección presidencial chilena de 1970 fue realizada el viernes 4 de septiembre de 1970, siendo el porcentaje más alto de votos para el candidato de la coalición de izquierda Unidad Popular Salvador Allende Gossens. Allende, quién había sido candidato a presidente en las elecciones de 19521958 y 1964, se impuso al ex-presidente Jorge Alessandri (candidato delPartido Nacional) y a Radomiro Tomić, nominado por la Democracia Cristiana. Esta elección se vio precedida de una importante radicalización en la política de Chile, la cual se manifestó en el incremento de la tensión ante de los comicios .



El golpe fue planeado inicialmente por un sector de la Armada de Chile, con el apoyo de los Estados Unidos. Posteriormente, se agregaron generales de los altos mandos de las Fuerzas Armadas y de Carabineros. El comandante en jefe del ejército, Augusto Pinochet asumió la dirección del complot.  El golpe de Estado acaecido en Chile el 11 de septiembre de 1973, fue una acción militar llevada a cabo por la Fuerzas Armadas y Carabineros, para derrocar al presidente socialista Salvador Allende y al gobierno izquierdista de la Unidad Popular. A ello le precedió, un período de alta polarización política y convulsión económica y social. Los militares contaron con el apoyo de la derecha política y también de un sector del Partido Demócrata Cristiano

Primera proclama golpista

Primera Proclama Golpista
A las 8.42, la “Cadena Democrática”, formadas por las radios Minería y Agricultura, emite la primera proclama militar. Allende debe hacer entrega inmediata de su cargo a la junta de gobierno, integrada por los jefes supremos de las fuerzas Armadas: Pinochet, Leigh, Merino y Mendoza. 
La proclama leída por el teniente coronel Roberto Guillard decía:
"A partir de este momento damos paso a una red provincial y nacional de radiodifusión de las fuerzas armadas. Se invita a todas las radioemisoras libres a conectarse a esta cadena.:"
Santiago, 11 de septiembre de 1973. Teniendo presente:
1°.- La gravísima crisis económica, social y moral que está destruyendo el país;
2°.- La incapacidad del Gobierno para adoptar las medidas que permitan detener el proceso y desarrollo del caos;
3°.- El constante incremento de los grupos armados paramilitares, organizados y entrenados por los partidos políticos de la Unidad Popular que llevarán al pueblo de Chile a una inevitable guerra civil, las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile declaran:
1°.- Que el señor Presidente de la República debe proceder a la inmediata entrega de su alto cargo a las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile.
2°.- Que las Fuerzas Armadas y el Cuerpo de Carabineros de Chile están unidos, para iniciar la histórica y responsable misión de luchar por la liberación de la Patria del yugo marxista, y la restauración del orden y de la institucionalidad.
3°- Los trabajadores de Chile pueden tener la seguridad de que las conquistas económicas y sociales que han alcanzado hasta la fecha no sufrirán modificaciones en lo fundamental.
4°.- La prensa, radiodifusoras y canales de televisión adictos a la Unidad Popular deben suspender sus actividades informativas a partir de este instante. De lo contrario recibirán castigo aéreo y terrestre.5.- El pueblo de Santiago debe permanecer en sus casas a fin de evitar víctimas inocentes.
Firmado: Augusto Pinochet Ugarte, General de ejército, Comandante en jefe del Ejército; Toribio Merino Castro, Almirante, Comandante en jefe de la Armada; Gustavo Leigh Gúzman, General del Aire, Comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Chile; y César Mendoza Durán, General, Director General de Carabineros de Chile 

Último discurso del Presidente Allende 

A las 10:15, a través de Radio Magallanes , Allende emite su último mensaje a la Nación:
“Quizás sea ésta la última oportunidad en que me pueda dirigir a ustedes. La Fuerza Aérea ha bombardeado las torres de Radio Portales y Radio Corporación. Mis palabras no tienen amargura, sino decepción, y serán ellas el castigo moral para los que han traicionado el juramento que hicieron: Soldados de Chile, comandantes en jefe y titulares… …el almirante Merino… más el señor Mendoza, general rastrero que sólo ayer manifestara su solidaridad y lealtad al gobierno, también se ha denominado director general de Carabineros.
“Ante estos hechos sólo me cabe decirle a los trabajadores: Yo no voy a renunciar. Colocado en un tránsito histórico, pagaré con mi vida la lealtad del pueblo. Y les digo que tengo la certeza de que la semilla que entregáramos a la conciencia digna de miles y miles de chilenos no podrá ser segada definitivamente. Tienen la fuerza, podrán avasallarnos, pero no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza.
La historia es nuestra y la hacen los pueblos.
¡Trabajadores de mi Patria!: Quiero agradecerles la lealtad que siempre tuvieron, la confianza que depositaron en un hombre que sólo fue intérprete de grandes anhelos de justicia, que empeñó su palabra en que respetaría la Constitución y la ley, y así lo hizo. En este momento definitivo, el último en que yo pueda dirigirme a ustedes, espero que aprovechen la lección.
El capital foráneo, el imperialismo, unidos a la reacción, crearon el clima para que las Fuerzas Armadas rompieran su tradición: la que les señaló Schneider y que reafirmara el Comandante Araya, víctimas del mismo sector social que hoy estará en sus casas esperando, con mano ajena, reconquistar el poder para seguir defendiendo sus granjerías y sus privilegios...
Me dirijo a los profesionales de la Patria, a los profesionales patriotas que siguieron trabajando contra la sedición auspiciada por los colegios profesionales, colegios de clases para defender también las ventajas de una sociedad capitalista de unos pocos.
Me dirijo a la juventud, a aquellos que cantaron y entregaron su alegría y espíritu de lucha. Me dirijo al hombre de Chile, al obrero, al campesino, al intelectual, a aquellos que serán perseguidos, porque en nuestro país el fascismo ya estuvo hace muchas horas presente; en los atentados terroristas, volando los puentes, cortando las vías férreas, destruyendo lo oleoductos y los gaseoductos, frente al silencio de quienes tenían la obligación de proceder. Estaban comprometidos. La historia los juzgará.
...Seguramente Radio Magallanes será acallada y el metal tranquilo de mi voz no llegará a ustedes. No importa, la seguirán oyendo. Siempre estaré junto a ustedes. Por lo menos mi recuerdo será el de un hombre digno que fue leal con la Patria.
El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse. El pueblo no debe dejarse arrasar ni acribillar, pero tampoco puede humillarse.
¡Trabajadores de mi Patria!: Tengo fe en Chile y en su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán de nuevo las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor. ¡Viva Chile!, ¡Viva el pueblo!, ¡Vivan los trabajadores!
Éstas son mis últimas palabras, teniendo la certeza de que mi sacrificio no será en vano. Tengo la certeza de que, por lo menos, habrá una sanción moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición.”

Ataque aéreo contra la Casa de Gobierno y la Casa Presidencial

Alrededor del mediodía, los aviones Hawker Hunter de la Fach, inician su ataque a La Moneda, disparando en cuatro oportunidades sus cohetes Sura P3 sobre la casa de gobierno; el daño causado es devastador. En el primer ataque los cohetes destruyeron el portón norte y los techos del primer piso; en el segundo ataque los cohetes cayeron en el pabellón que separa los patios de Los Cañones y Los Naranjos. En el tercero un cohete rebotó en una de las gárgolas de la fachada y estalló en el segundo piso del lado sur; en el cuarto los cohetes cayeron de lleno sobre la fachada y una bola de fuego saltó a la calle y al quinto los aviones dispararon sus cañones automáticos Rolls Royce Aden calibre 30 mm. Otros dos aviones bombardean la residencia presidencial de Tomás Moro, a la sazón defendida por algunos miembros del GAP que no alcanzaron a irse con Allende a La Moneda.
 El ataque prosigue al palacio de gobierno con el uso de gases lacrimógenos, pero al ver que La Moneda todavía se negaba a rendirse, el general Javier Palacios decide tomarla y envía a un grupo de soldados a derribar la puerta del palacio, son las dos y media de la tarde. Dentro le gritan a Allende: ¡Presidente!, ¡el primer piso está tomado por los militares! ¡dicen que deben bajar y rendirse!.

Muerte del Presidente
según el testimonio de uno de sus doctores, Patricio Guijón, que regresó para llevarse su mascarilla antigas ("de recuerdo", dice), Allende grita ¡Allende no se rinde, milicos de mierda! y con el fusil AK-47 se dispara en la barbilla, explotando la bóveda craneana y muriendo al instante.
Palacios entra en el salón Independencia, y se encuentra con Allende y el doctor Guijón. Reconoce al presidente por su macizo reloj Galga Coulde. Llama al oficial de radio y entrega su escueto informe: “Misión cumplida. Moneda tomada, presidente muerto".




Consecuencias inmediatas del golpe

En las zonas rurales se detuvieron a dirigentes de la Reforma Agraria, muchos fueron ejecutados en el lugar de detención. La colonia alemana benefactora Villa Baviera, ubicada en la zona central, sirvió como centro de detención y lugar de desaparición de muchos activistas de la Unidad Popular.Se declaró el toque de queda en todo el territorio nacional a partir de las 15 horas del 11 de septiembre de 1973, se permitió a los civiles previo control abandonar el centro de las ciudades y dirigirse a sus casas. En Santiago, inmediatamente las instalaciones de las radios Portales,Magallanes y Corporación, todas las estaciones de TV excepto Canal 13 fueron silenciadas.. Los diarios Clarín, El Siglo y otros fueron allanados y sus prensas destruidas.

Cientos de miles de proallendistas tomaron aquellas especies, registros, carné de partidos, libros y propaganda comprometedora y se deshicieron de ella enterrándolas, quemándolas o botándolas a los cauces de ríos. Se declaró ilegal y proscrito al Partido Comunista Socialista; los partidos Nacional, Democratacristiano y Radical fueron suspendidos cuando se disolvió el Senado. Se conminó a todos los ciudadanos a entregar sus armas de fuego en las comisarías de Carabineros.

Se instó a denunciar a los adherentes al gobierno, por ser traidores a la Patria, según decía el comunicado militar denunciándolos ante las comandancias y cantones. 
Se llamó a aquellos que tuvieran cargos y representatividades de grupos sociales a entregarse a las comisarías para regularizar su situación. Se detuvieron a miles de personas y  a aquellas personas que fueron llamadas a viva voz y respondieron de entre la multitud fueron ejecutadas en el mismo lugar, como es el caso de Víctor Jara.
En la Universidad Técnica del Estado de Santiago, militares hicieron allanamientos y ejecutaron a decenas de estudiantes combatientes en las mismas aulas. Muchas ejecuciones fueron hechas a la "bala en fila". 
Las poblaciones populares tales como La Legua, La Victoria y San Ramón (La Bandera) fueron allanadas y sus pobladores detenidos en masa. En la Villa La Reina se produjeron ejecuciones sumarias a aquellos líderes que se sorprendieron ocultos.
Miles de perseguidos políticos se refugiaron en las embajadas de gobiernos amigos de la Unidad Popular, como es el caso de Suecia, Italia, Canadá, Australia, Dinamarca,México, Unión Soviética y Cuba .



Consecuencias generales del golpe

El golpe de Estado puso fin en Chile a casi 50 años de desarrollo de la institucionalidad democrática. Tal institucionalidad venía experimentando desde comienzos de los 60 una fuerte erosión producto de los proyectos mutuamente excluyentes de los sectores políticos dominantes. En lo más cercano el golpe clausuró la "vía chilena al socialismo" largamente esperada por los sectores de izquierda e inauguró un extenso período de facto caracterizado por la concentración casi total del poder en la Junta de Gobierno y en la figura del General Pinochet, así como una fuerte represión sobre los sectores opositores y disidentes mediante la acción de organismos de seguridad creados para el efecto, con su cortejo de violaciones a los derechos humanos fundamentales. 
En lo social significó el comienzo de un dominio sin contrapeso de los sectores empresariales, los cuales aprovecharon el desmantelamiento de la estructura productiva estatal llevado a cabo por el gobierno de Pinochet a fines de los 70 y comienzos de los 80, por medio de un proceso de privatización. Por otra parte, significó el comienzo de una pauperización de las clases medias y la precariedad e inestabilidad laboral para los sectores asalariados. También el golpe significó el comienzo de un largo exilio para miles de chilenos.





jueves, 18 de octubre de 2012

Golpe de Estado 1924


El 13 de mayo de 1924, la Cámara de Diputados aprobó un proyecto que declaraba que la gratuidad del cargo de parlamentario no obstaba a conceder a los senadores y diputados, mediante ley, asignaciones a título de gastos de representación (dieta parlamentaria). En la sesión de 3 de septiembre del mismo año, el Senado de Chile aprobó en general, en segundo trámite legislativo, dicho proyecto de ley.
A la sesión del día siguiente, un grupo de jóvenes oficiales del ejército concurrió a las galerías del Senado con el fin de expresar su oposición a la aprobación de la dieta parlamentaria y la postergación de la tramitación de las leyes sociales. Dichos oficiales fueron conminados por el Ministro de Guerra a abandonar el recinto. Al hacerlo, hicieron golpear su sables contra la pared como señal de desafío y de respaldo a la agenda social del Presidente Arturo Alessandri Palma.

Comité Militar

El 5 de septiembre de 1925 un grupo de oficiales constituyeron el llamado Comité Militar. Los uniformados concurrieron a La Moneda a expresar su malestar a Alessandri, presentándole una serie de peticiones en relación al despacho de los proyectos de ley que permanecían pendientes, ante lo cual el Presidente se comprometió a buscar solución con la condicionante de que ellos volvieran a sus cuarteles. Aun así los militares chilenos preparaban un golpe a realizare el día 11 de septiembre.
Ante dicha presión, el Congreso Nacional aprobó en las sesiones del 8 al 9 de septiembre las iniciativas de corte social: jornada laboral de ocho horas, supresión del trabajo infantil, reglamentación del contrato colectivo, la ley de accidentes del trabajo y seguro obrero, legalización de los sindicatos, la ley de cooperativas y la creación de los tribunales de conciliación y arbitraje laboral; todas pospuestas anteriormente por ambas cámaras legislativas.
Sin embargo, el comité militar prefirió seguir funcionando, y le pidió a Alessandri que disolviera el Congreso. Tras este hecho, Alessandri, sumergido en una situación que ya no podía manejar, vio su poder en jaque y prefirió renunciar y autoexiliarse a Europa el 9 de septiembre. El Congreso, sin pronunciarse sobre la renuncia, se limitó concederle una autorización para ausentarse del país por seis meses, lo que hizo efectivo al día siguiente.

Partido Demócrata Cristiano

La historia del PDC se remonta a fines de la década de 1920, cuando comienzan a resquebrajarse las convenciones ideológicas que hasta ese momento había apoyado la juventud católica afiliada al Partido Conservador. Desde esos tiempos, grupos de jóvenes críticos se interesaron por influencias diferentes de las que animaban a sus líderes partidarios, que, en general, estaban imbuidos en las doctrinas decimonónicas del capitalismo liberal y de la defensa de la Iglesia Católica frente a los avances de la secularización del Estado.
Por un lado, la nueva generación se dedicó al estudio de nuevos aspectos contenidos en la denominada doctrina social de la Iglesia, desde la publicación de la encíclica Rerum Novarum a fines del siglo anterior. Estos incipientes llamados pontificios a la conciencia social habían sido ignorados, hasta ese punto, por los grupos conservadores chilenos y por buena parte de la Iglesia Católica local.
Por otro, los jóvenes conservadores creían que esta doctrina social era la alternativa disponible para frenar el avance del comunismo, que conocían más de cerca que sus mayores debido a su participación en el ambiente universitario y a sus incursiones en las barriadas populares.
En el ámbito de la filosofía política, los grupos juveniles buscaron inspiración en la corriente denominada humanismo cristiano, que había surgido en Francia a partir de las publicaciones del autor Jacques Maritain. Este autor, básicamente, bogaba por la aplicación política del tomismo en el mundo moderno.

Se organizaron en diversas agrupaciones que, en la mayoría de la ocasiones, funcionaron al interior del mismo Partido Conservador:
1928: Asociación Nacional de Jóvenes Católicos
1935: Movimiento Nacional de la Juventud Conservadora
1937: Falange Nacional
Al año siguiente de creada la Falange Nacional, en 1938 se produce el quiebre definitivo con los conservadores, a raíz de la campaña presidencial de ese año.
El período que siguió fue dedicado a la reagrupación de fuerzas y la fundación oficial del PDC, llevada a cabo en 1957 con el Partido Conservador Social Cristiano, grupo escindidos del Partido Conservador. Posteriormente se sumaron a al PDC grupos menores como el Partido Nacional Cristiano y los denominados agrario-laboristas.

[editar]Primera campaña presidencial

El PDC presentó a Eduardo Frei Montalva como candidato en las elecciones presidenciales de 1958, obteniendo 254.233 votos (20,7% de los votos válidamente emitidos) y el tercer lugar en la elección que ganó Jorge Alessandri y en la que resultó segundo Salvador Allende.

De acuerdo al Informe Church, en 1962 se inician las primeras ayudas financieras de la CIA al partido. Al año siguiente, las elecciones municipales de 1963 significaron un fuerte posicionamiento del PDC en el escenario político chileno. El PDC registró un aumento de su votación (22,8%) que si bien no era un incremento abultado respecto a la elección presidencial de 1958, alcanzaba para que la colectividad se ubicara como el partido más votado del país, desplazando de ese puesto al Partido Radical, que alcanzó un 21,5% de la votación. 

Voto Femenino


Las mujeres participaron por primera vez en la elección presidencial de 1952, donde fue electo Carlos Ibañez del Campo. Desde entonces, su participación en los procesos electorales se fue ampliando progresivamente hasta llegar en 1970 a la prioridad con los votantes masculinos.

La extensión del voto a las mujeres fue motivo de debate desde la década de 1920. Sin embargo, la oposición de los partidos anticlericales y de izquierda, debido a la tendencia conservadora del electorado femenino, retardó por varias décadas más la concesión de ese derecho. En 1935 se aprobó el voto femenino para las elecciones municipales, y recién en 1949 se concedió el derecho a voto a las mujeres para las elecciones presidenciales y parlamentarias.

Huelga del Salitre





Lo que demandaban los huelguistas era lo siguiente: 
§  Aceptar que mientras se supriman las fichas y se emita dinero sencillo cada Oficina representada y suscrita por su Gerente respectivo reciba las de otra Oficina y de ella misma a la par.
§  Pago de los jornales a razón de un cambio fijo de 18 peniques. Libertad de comercio en la Oficina en forma amplia y absoluta.
§  Cierre general con reja de fierro de todos los cachuchos y chulladores de las Oficinas Salitreras.
§  En cada oficina habrá una balanza y una vara al lado afuera de la pulpería y tienda para confrontar pesos y medidas.
§  Conceder local gratuito para fundar escuelas nocturnas para obreros, siempre que algunos de ellos lo pida con tal objeto.
§  Que el Administrador no pueda hacer arrojar a la rampa el caliche decomisado y aprovecharlo después en los cachuchos.
§  Que el Administrador ni ningún empleado de la Oficina pueda despedir a los obreros que han tomado parte en el presente movimiento, ni a los jefes, sin un desahucio de 2 a 3 meses, o una indemnización en cambio de 300 a 500 pesos.
§  Que en el futuro sea obligatorio para obreros y patrones un desahucio de 15 días cuando se ponga término al contrato.


El 16 de diciembre, miles de trabajadores en paro llegaron a la ciudad de Iquique, respaldando las demandas de los salitreros a la autoridad provincial, con el fin de obtener su intervención. Las solicitudes anteriores, habían fracasado en 1901, 1903 y 1904.
El gobierno de Santiago, había dado ya la orden de traslado de tres regimientos para reforzar los dos que había en Iquique y envió desde Valparaíso un crucero con tropas de desembarco.
El intendente interino Julio Guzmán García, mediaba en las negociaciones con los representantes pampinos, llegaron al puerto el Intendente titular Carlos Eastman Quiroga y el general Roberto Silva Renard, jefe de la Primera Zona Militar del Ejército, acompañados del coronel Sinforoso Ledesma. Todos ellos fueron recibidos con aclamaciones por los obreros, quienes creyeron que venían comisionados para trasladarlos y solucionar sus problemas.
A medida que avanzaba la huelga, más y más pampinos se unían a ella, llegándose a estimar que para el 21 de diciembre eran entre 10.000 y 12.000 los obreros en huelga en Iquique. A los pocos días de haber llegado, este gran conglomerado de trabajadores estaban reunidos en la plaza Manuel Montt y en la Escuela Domingo Santa María, pidiendo al gobierno que actuara de mediador con los patrones de las firmas salitreras extranjeras (ingleses) para solucionar sus demandas. Por su parte, los patrones se negaban a negociar mientras los obreros no reanudaran sus actividades.
Órdenes oficiales desde Santiago determinaban que los huelguistas abandonaran la plaza y la escuela y se ubicaran en el Hipódromo, para luego regresar en tren a las salitreras y reanudar sus faenas. Los pampinos se negaron, pues intuían que si regresaban a sus labores, sus peticiones serían ignoradas.
Frente a la creciente tensión que había ya entre los grupos, el 20 de diciembre de 1907 los dirigentes efectuaron una reunión con el intendente Eastman. En esos mismos momentos era declarado el estado de sitio, haciendo que las libertades constitucionales fueron suspendidas, todo esto por medio de un decreto publicado en la prensa. Mientras la reunión se efectuaba en la oficina salitrera Buenaventura, un grupo de obreros con sus familias trataron de abandonar el lugar y fueron acribillados en la línea férrea. Como resultado de esta acción 6 obreros murieron y los demás terminaron heridos.
El 21 de diciembre de 1907 se efectuaron los funerales de los obreros, e inmediatamente después de concluir las ceremonias se les ordenó a todos los trabajadores que abandonaran las dependencias de la escuela y sus alrededores y se trasladaran a las casuchas del Club Hípico. Los obreros se negaron a ir, temiendo ser cañoneados por los barcos que apuntaban el camino que deberían recorrer hacia dicho lugar.
El general Roberto Silva Renard, junto al coronel Ledesma, tenían la misión de desalojar a los trabajadores en huelga. Se señaló a los dirigentes del comité de trabajadores, que si no salían del edificio abrirían fuego contra ellos. Ante la negativa de éstos, el jefe militar reiteró que abriría fuego sobre los huelguistas. Pese a las amenazas reiteradas, sólo un pequeño grupo de trabajadores abandonó la plaza.
A la hora señalada por Silva Renard, éste ordenó a los soldados disparar a los miembros del comité que se encontraban en la azotea de la escuela, quienes cayeron muertos con la primera descarga. La multitud, desesperada y buscando escapar, se arrojó sobre la tropa y ésta repitió el fuego al que se le añadió el de las ametralladoras. La tropa, después de lanzar fuego graneado desde la plaza, entró ametrallando por los patios y las salas de clase, matando mujeres y niños sin clemencia. Los sobrevivientes de la matanza con posterioridad fueron escoltados con sables hasta el Club Hípico, y desde allí a la pampa.

El número de víctimas que dejó la matanza es discutible. En primera instancia, el informe oficial del General Silva Renard habla en un primer momento de 140 muertos, para posteriormente ascender a 195. Ese es el número que otorga Nicolás Palacios testigo de la matanza. Sin embargo, esta cifra es considerada irreal, dada la cantidad de obreros que se hallaban en el lugar. El número más alto conjeturado ha sido de 3.600, aunque es considerado especulativo. La cifra más aceptada es de cerca de 2.200. Pese a lo anterior, sea cual fuere el número, al decir de Correa y otros, "nadie duda de la singular magnitud de la matanza".
El general Silva Renard informó al gobierno de Santiago acerca de los hechos, minimizando su actuación y haciendo responsable de los hechos a los huelguistas. El Congreso Nacional reaccionó muy tibiamente a estas actitudes, ordenando crear una comisión investigadora, a la cual no se designó a nadie y no realizó ninguna función. Recién los hechos fueron cuestionados e investigados por una Comisión Oficial, la cual publicó un informe que comunicó a la Cámara de Diputados en una sesión del 7 de noviembre de 1913.
La mejora de las condiciones de los obreros fue lenta, y no sería hasta 1920 cuando se empezaran a dictar las leyes sociales mínimas, tales como la de pago en dinero y jornada de trabajo. Por su parte, en 1914, el general Silva Renard, escapó malherido de un intento de asesinato por parte del anarquista Antonio Ramón Ramón, un español cuyo hermano Manuel Vacca fue muerto en la Escuela Santa María. El general Silva Renard moriría unos años más tarde a causa de estas heridas. La matanza sin embargo, no fue la última aunque sí la mayor sucedida contra trabajadores que protestaban en Chile, el historiador chileno Hernán Ramírez Necochea estima que entre 1901 y 1970 unas 15.000 personas murieron en enfrentamientos con carabineros y militares.

Período Parlamentario


Los eventos que marca su comienzo es la Guerra Civil de 1891, y su fin el Golpe de Estado de 1924, que implicó la clausura del Congreso, y la promulgación de la Constitución de 1925, que estableció un régimen presidencial. 
República Parlamentaria es un período en la historia de Chile que se extiende entre 1891 y 1925. Corresponde a un régimen seudoparlamentario, también caracterizado como gobierno de partido bajo formas parlamentarias, entendiendo por parlamentario en su época una interpretación dada a las relaciones Presidente-Congreso Nacional en la Constitución de 1833, después de la derrota de Balmaceda en la Guerra Civil. Durante este periodo se destacó principalmente el predominio del Congreso Nacional sobre el Presidente de la República.

Tratado de 1881 entre Argentina y Chile


El Tratado de Límites de 1881 fue firmado en ese año entre la República Argentina y la República de Chile para fijar los límites precisos entre ambas naciones a lo largo de toda su frontera común.
El anterior Tratado de Límites de 1856 acordaba la aplicación del principio del Uti possidetis iure, ordenamiento legal bajo la base de que los nuevos estados, al pasar a la vida independiente, tendrían como fronteras las que le corresponderían de las colonias españolas cuando formaban parte integrante del imperio español como un virreinato, capitanía general o audiencia, para el año 1810, último de la monarquía española para la posesión legítima de sus colonias de América. En un principio ambos estados interpretaron de manera similar los registros coloniales, aunque estos no eran conocidos muy exhaustivamente. Las Reales Cédulas a menudo eran contradictorias o superponían jurisdicciones pues el conocimiento del territorio aún en 1810 era limitado, en especial el de la parte austral del continente.
Posteriormente, ambos países pasaron a obrar bajo el concepto de terra nullius intentando crear colonias en tierras no ocupadas por el otro país.
Desde entonces se buscaba una demarcación fronteriza factible y que satisficiera los intereses de ambas naciones.
El Tratado se firmó en la ciudad de Buenos Aires el 23 de julio de 1881 por Francisco de B. Echeverría, Cónsul General de Chile en Buenos Aires y el Doctor Bernardo de Irigoyen, Ministro de Relaciones Exteriores de la Argentina en representación de los presidentes de las respectivas naciones y fue ratificado en Santiago de Chile el 22 de octubre de 1881.
En la actualidad el tratado continúa siendo válido, ya que no ha sido modificado por ningún otro posterior.
El texto completo del Tratado puede ser visto en Tratado de Límites entre Chile y Argentina de 1881.

miércoles, 17 de octubre de 2012

La Guerra del Pacífico


La Guerra del Pacífico, también denominada Guerra del Guano y Salitre, fue un conflicto armado acontecido entre1879 y 1883 en el cual se enfrentaron la República de Chile contra las repúblicas de Bolivia y del Perú.
En 1878, el congreso de Bolivia se abocó al estudio del acuerdo celebrado por el gobierno en 1873.. Ello se hizo por la Asamblea Nacional Constituyente boliviana mediante una ley, el 14 de febrero de 1878, a condición de que se pagara un impuesto de 10 centavos por quintal de salitre exportado por la compañía.
Artículo Único. Se aprueba la transacción celebrada por el ejecutivo en 27 de noviembre de 1873 con el apoderado de la Compañía Anónima de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta a condición de hacer efectivo, como mínimo, un impuesto de diez centavos en quintal de salitre exportado.
Asamblea Nacional Constituyente de Bolivia. Ley de 14 de febrero de 1878.
La Guerra del Pacífico se divide en cinco etapas: Campaña MarítimaCampaña de TarapacáCampaña de Tacna y Arica,Campaña de Lima y Campaña de la Sierra. Durante todas estas etapas, el ejército chileno logró avanzar hacia el norte hasta vencer finalmente en la sierra peruana.
Las Causas De La Guerra Del Pacifico

a)     Defectuosa delimitación fronteriza, entre las repúblicas de Chile y Bolivia.
b)    Difícil situación económica de las repúblicas de Bolivia y Perú.
c)     Explotación de riquezas por capitales Chilenos, en la zona cuyos limites no estaban bien precisados.
d)    Incumplimiento, por parte de Bolivia del tratado chileno-boliviano de 1874.
e)     Aspiraciones hegemonías de Perú en la región del pacifico sur.
f)   Confiscación de los bienes de las compañías mineras chilenas y remates de las      salitreras ordenado por el presidente de Bolivia general Hilarion Daza.